La pandemia de Coronavirus SARS-COV-2 llega a Bolivia el 10 de marzo, fecha en la cual oficialmente se notifica los primeros casos de COVID-19 en Bolivia. Es a partir de esta etapa que se aplican ajustes en las medidas de bioseguridad recomendadas por las instancias nacionales e internacionales con el personal de Salud. Estas medidas estaban direccionadas a la protección personal básica; como es el uso de mascarillas faciales en el personal de salud y público en general que acude al centro de salud.
La presencia del COVID-19, obliga a revisar todas las normativas de bioseguridad en establecimientos de salud, especialmente en establecimientos de primer nivel, en el cual está catalogado el Centro de Salud de CEMSE.
El 23 de marzo de 2020 se declara la cuarentena en Bolivia, mismo que se decide suspender actividades de atención en el Centro de Salud y empezar ajustar las medidas de bioseguridad y de los equipos de protección personal adecuadas para afrontar la pandemia. En este sentido, el 13 de Mayo, se reinicia la atención en los servicios de salud, aplicando modificaciones a la estructura de atención del servicio de salud recomendadas por la OMS/OPS. Todas estas modificaciones destinadas a cumplir ciertos parámetros para la Prevención y Control de Infecciones (PCI), así como de evitar la transmisión del COVID-19. Medidas que estaban destinadas a garantizar la seguridad del personal, visitantes y pacientes, de aumentar la habilidad del servicio de salud de responder a al brote, como también de reducir el riesgo del Centro de Salud de convertirse en un centro amplificador del brote.
MEDIDAS APLICADAS EN TIEMPO DE PANDEMIA
Acciones de prevención y control de infecciones (PCI) para COVID-19, aplicadas en el Centro de Salud, fueron:
¾ Exigir medidas de precaución estándares: todos los pacientes que acudían al centro de salud debían cumplir con las siguientes disposiciones; uso obligatorio de barbijo, desinfección en los lugares de ingreso al edifico e ingreso al Centro de Salud, que consiste en desinfección de manos, calzados y vestimenta (pediluvios, alcohol en gel, toma de temperatura).
¾ Implementación de Equipos de Protección Personal (EPP) para el personal de Salud: que consiste en; cofia o gorro, barbijos, pantalla facial y lentes de protección, mameluco impermeable, botas de protección impermeable, pijamas, zapatos de uso exclusivo en centro de salud, guantes descartables.
¾ Implementación de equipos de desinfección: Se habilitaron atomizadores para soluciones desinfectantes con lavandina para superficies, vestimentas, mobiliario y equipos, atomizadores con alcohol al 70% para equipo de computación. Mochila pulverizadora para desinfección de superficies contaminadas (pisos, bancas, barandas, etc.)
¾ Triaje dirigido a COVID-19 previo a la consulta: Destinado al reconocimiento temprano de casos sospechoso o casos clínicamente evidentes. Los casos sospechosos eran evaluados previamente por él o la médico de turno antes de pasar al resto de ruta crítica establecida. Estos pacientes fueron evaluados en un espacio abierto en sitio apartado de los ambientes del Centro de Salud.
¾ Precaución en la revisión a los pacientes: Los casos que pasan a consultorio, ameritaban el uso de EPP por parte del personal de salud. Estas medidas de protección asumidas, se basan en la suposición de que todos los pacientes sea considerados sospechosos o casos asintomáticos, porque muchos pacientes negaban signo de sintomatología de COVID-19 para recibir atención.
¾ Implementación de flujos administrativos o de atención: Acción destinada a cambiar el flujo de atención de pacientes para todos los servicios, con el fin de pasar por filtros pre-establecidos y evitar la congestión de pacientes en sala de espera, la misma que estaba limitada a 4 personas, guardando la distancias y aplicando barreras físicas de contacto (biombos de separación).
¾ Aplicación de procesos de desinfección diarios: La indumentaria utilizada en la jornada laboral, ropajes de consultorio, muebles y equipo utilizado en la atención, son desinfectados diariamente. Actividad que era y es de responsabilidad de cada funcionario del Centro de Salud (medico, odontóloga, enfermera, administrativo, limpieza).
¾ Desinfección de ambientes: Se implementa procesos de limpieza y desinfección de ambientes diariamente y desinfección a profundidad los fines de semana. Para mejorar la desinfección de ambientes (paredes y mobiliario), se realiza desinfección con empresa especializada en fumigación una vez al mes o cada 15 días cuando se presentaban casos sospechosos de manera frecuente.
¾ Habilitación de espacio para vestidor del personal de Salud: Para el personal de salud, se habilitó un espacio para realizar el cambio de ropa de calle por EPP, así como la desinfección de manos, cara, cabello. Se habilito también un espacio fuera de Centro de Salud para realizar la desinfección de EPP (mamelucos y botas de protección).
RESULTADOS ALCANZADOS:
Luego de cinco (5) meses de aplicación e implementación de medidas de prevención y espacios destinados a la desinfección y atención de pacientes protegidos, cumplieron con los objetivos de la Prevención y Control de Infecciones (PCI) en el Centro de Salud CEMSE. Se puede señalar en:
¾ Hasta la fecha no se ha registrado ningún caso de COVID-19 dentro el personal de salud. Debido a un estricto cumplimiento de las normativas de protección personal, normas de desinfección individual.
¾ No se tiene registro de familiares contagiados, debido a que se asumieron con mucha responsabilidad las medidas de protección en domicilio y sobre todo al retorno a casa.
¾ No se tiene registro de paciente que fueron contagiados en los ambientes del Centro, por el retorno de pacientes a continuar realizando consultas por otras patologías y por la seguridad que les brinda las medidas de bioseguridad implementadas y que fueron aceptadas y valoradas por los mismos pacientes. Hecho que se debió a las acciones de desinfecciones rutinarias (realizadas por personal de limpieza) y especializadas (empresa de desinfección), además de desinfectar inmediatamente los espacios contaminados por casos altamente sospechosos o confirmados por COVID-19.
¾ Finalmente, al no contar con contagios por parte del personal de salud con COVID-19, permite afirmar que “Se ha aplicado y se continúa aplicando bien la normativa de prevención y control de infecciones”.